El pasado fin de semana, los miembros de la Estaca Tierra del Fuego se reunieron en una edificante Conferencia de Estaca, en la que se sintió con gran poder la influencia del Espíritu Santo. La reunión fue presidida por el Élder Walker, Consejero del Área, y el Élder Texeira, de los Setenta del Área, quienes compartieron mensajes inspiradores centrados en el amor de nuestro Padre Celestial y la misión redentora de nuestro Salvador Jesucristo.
El Élder Walker trajo un mensaje especial de parte del presidente Russell M. Nelson, expresando su amor y saludos a los miembros de la Estaca. Este gesto fue recibido con gratitud y gozo por la congregación, recordando el profundo vínculo que nos une con nuestros líderes de la Iglesia.
Un momento especial de la conferencia fue la participación del coro del Barrio Monte Olivia, que interpretó con gran reverencia los himnos "A vencer" (167) como preludio y "¡Grande eres tú!" (41) como himno de cierre, elevando los corazones de los presentes y preparando espiritualmente a la congregación para recibir los mensajes de la reunión.
El presidente de la Misión Argentina Comodoro Rivadavia, Kevin G. Dickey, y su esposa, Stephanie R. Dickey, compartieron conmovedoras palabras sobre la importancia de la obra misional y el papel fundamental de los misioneros en la predicación del Evangelio de Jesucristo. También se destacaron testimonios poderosos de varios hermanos y hermanas sobre el templo y su impacto en nuestras vidas, resaltando la importancia de los convenios sagrados y la bendición de tener una Casa del Señor donde fortalecer nuestra relación con Él.
La conferencia reunió a miembros de toda la Estaca, incluyendo a muchos que viajaron desde la ciudad de Río Grande para participar de manera presencial. Además, gracias a la tecnología, la transmisión vía YouTube permitió que hermanos de distintos lugares, incluso de Puerto Williams, Chile, pudieran ser parte de esta experiencia espiritual única.
Toda la conferencia estuvo enfocada en Jesucristo y Su amor infinito por cada uno de Sus hijos, recordándonos que a través de Él podemos hallar paz, fortaleza y propósito en nuestra vida. Sin duda, fue un encuentro espiritual que renovó la fe y el compromiso de todos los asistentes.
